En este día tan especial sólo queremos agradecer a quienes siempre están extendiendo sus manos para ayudar, para acompañar, para abrazar.
En sus más de 20 años en Argentina, Mensajeros de la Paz ha generado incontables espacios de encuentro que acercan a las personas con el corazón abierto, dispuestas a ayudar. Hemos conocido a miles de personas que llevamos en el corazón y sería imposible mencionarlas a todas.
En un contexto tan hostil y complicado saberse acompañado es tan reconfortante, por eso queremos aprovechar esta ocasión para agradecer a los amigos de Mensajeros de la Paz Argentina:
A las y los protagonistas de nuestros proyectos que nos devuelven tanto amor.
A quienes se acercan a regalarnos su tiempo: las voluntarias y voluntarios que, con su trabajo desinteresado, hacen de este mundo un lugar más empático.
A las personas que representan a las empresas con quienes generamos alianzas que nos permiten continuar con nuestra misión.
A las personas que forman parte de los equipos, con quienes pasamos tantos momentos gratos y de ratos muy difíciles y que, de alguna manera, se vuelven amigas/os.
“La amistad es un corazón que bombea con pasado al ritmo de una canción, que con amigos cantearemos o en silencio callaremos según sea la ocasión”, dicen León Gieco y Gustavo Santaolalla en la canción “La Amistad”, y estamos de acuerdo.
¡Feliz día de la amistad!